A partir del acuerdo con el FMI, Javier Milei profundizará la desregulación del sistema eléctrico que ya refleja una drástica quita de subsidios y que, solo en los últimos nueve meses, afectó a cerca de 2 millones de hogares.
Según un reciente estudio del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (UBA-Conicet), entre julio de 2024 y abril de 2025 más de 2.1 millones de hogares dejaron de ser considerados de bajos ingresos.
Lo curioso es que, en su gran mayoría, pasaron del rango más bajo al nivel de ingresos más alto (N1), por lo que dejaron de recibir subsidios nacionales. Eso, a raíz de la modificación del padrón de usuarios del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE).
La cifra implica un fuerte impacto en la cobertura de costos y en el gasto en subsidios, considerando que cerca de dos tercios del gasto en subvenciones nacionales van al servicio de energía eléctrica.
Los datos analizados por el observatorio surgen del último informe de Guillermo Francos al Congreso y también muestran que casi 430 mil usuarios dejaron de pertenecer al Nivel 2 (bajos ingresos).
En coincidencia con la reducción de 14 puntos en la tasa de la pobreza que registró el Indec (dato fuertemente cuestionado por especialistas), los hogares considerados de bajos ingresos (N2) pasaron de ser el 52% del padrón a ser el 38%.
"Esto tiene un impacto importante en la baja del gasto en subsidios y un posible correlato en las facturas de aquellos usuarios, en todo el país, que dejaron de tener el 70% del costo eléctrico subsidiado y que no reciben ayuda provincial", dijo el economista Julián Rojo.